Felipe V |
La muerte del último los Austrias, Carlos II, va a plantear un problema sucesorio en el que van a participar las potencias europeas, internacionalizando el conflicto que conocemos como "Guerra de Sucesión" (1702-1715). El último testamento de Carlos II nombraba heredero de la Corona a Felipe de Anjou, nieto de Luis XIV ( recordemos que entre las cláusulas de la Paz de los Pirineos se incluía el matrimonio de una de las hijas de Felipe IV, María Teresa, con Luis XIV, lo que dio origen a los derechos dinásticos esgrimidos por los Borbones). La presencia de los Borbones en ambas monarquías (España y Francia) hacía que el resto de potencias europeas sintieran amenazada su posición en el continente y apoyaran las aspiraciones de otro candidato al trono: el archiduque Carlos de Habsburgo.
La Guerra de Sucesión va a tener una doble vertiente: por una parte, enfrentamiento europeo, con la lucha de potencias como Austria, Portugal, Holanda e Inglaterra contra Francia y España; por otra parte, enfrentamiento entre diferentes territorios peninsulares al apoyar Castilla mayoritariamente a Felipe y los territorios de la Corona de Aragón a Carlos.
Como casi siempre en Historia, hay que matizar las generalizaciones porque, en un principio, Felipe V es bien recibido en Barcelona, sobre todo después de que el resultado de las Cortes de 1701-1702 fuera bastante favorable para estos territorios. Os dejo el enlace a este blog donde se analizan las verdaderas causas del rechazo catalán al reinado de Felipe V. No obstante, dado lo escaso del espacio disponible para redactar nuestro concepto deberemos optar por generalizar y no entrar en detalles; diremos que en los territorios de la Corona de Aragón, especialmente en Cataluña, las instituciones y las clases populares respaldaron al candidato austriaco ante los recelos que despertaban las políticas centralizadoras y uniformadoras de los Borbones, puestas ya en práctica por Luis XIV en Francia.
Las fuerzas de ambos candidatos estaban bastante equilibradas. Dos sucesos marca el principio del fin de las aspiraciones de Carlos de Habsburgo a la Corona española: en el plano nacional, sus tropas son derrotadas por las de Felipe V en la batalla de Almansa (1707); en la esfera internacional, en 1711 muere el emperador de Austria, José I, y Carlos pasa a ocupar su lugar en el trono austriaco. Los mismos motivos que explicaban el apoyo de Inglaterra y Holanda a Carlos (evitar la presencia de una misma dinastía al frente de dos potencias continentales), son los que explican ahora que estos países le retiren su apoyo: ven como una amenaza que Carlos una en su persona el trono imperial y el español y manifiestan su interés por acabar la guerra.
La paz entre los contendientes se firmó en los Tratados de Utrecht y Rastadt (1713-1714), que reconocen a Felipe V como monarca español pero a cambio de importantes concesiones territoriales a Austria (Flandes, Milanesado, Nápoles y Cerdeña) y a Inglaterra (Gibraltar y Menorca).
Las últimas acciones bélicas en la Península serán la toma de Barcelona por las tropas borbónicas (11 de septiembre de 1714) y la ocupación de Mallorca en 1715.
La resistencia militar de los territorios de la Corona de Aragón hizo que Felipe V pudiera aplicar el derecho de conquista y reorganizar estos territorios haciendo desaparecer sus instituciones propias y sus fueros, siguiendo el modelo centralista ya ensayado en Francia. Se extiende a estos territorios la organización política de Castilla, donde ya se había producido una concentración del poder real desde el siglo XVI.
¿Era inevitable que se perdieran estas instituciones y fueros con el ascenso al poder de un Borbón? La respuesta es no, puesto que los territorios que se mantuvieron fieles a Felipe V (Navarra, País Vasco) pudieron conservar sus fueros.
Esta reorganización de los territorios peninsulares se realiza mediante los Decretos de Nueva Planta: Valencia (1707), Aragón (1707-1711), Mallorca (1715) y Cataluña (1716). Se impone la organización político-administrativa de Castilla. Se eliminan las Cortes de los diferentes reinos, que se van a integrar en las Cortes de Castilla; se elimina el Consejo de Aragón; se sustituyen los virreyes por los capitanes generales, delegados directos del rey en los diferentes territorios; se introduce la figura del intendente y se establece un nuevo modelo impositivo. Reorganización de los diferentes estados que permite iniciar el camino del absolutismo monárquico en España.
Os dejo aquí el enlace a una presentación que os puede ser de utilidad:
Concepto 7. los decretos de nueva planta from jmap2222
Como es habitual, os recomiendo consultar los criterios de corrección de la Prueba de Acceso para no dejarnos nada al redactar el concepto. Os propongo el siguiente guión:
Como es habitual, os recomiendo consultar los criterios de corrección de la Prueba de Acceso para no dejarnos nada al redactar el concepto. Os propongo el siguiente guión:
- Definición breve de los Decretos de Nueva Planta. (conjunto de iniciativas legislativas que imponen la organización político-administrativa de Castilla a los territorios de la Corona de Aragón).
- Contexto histórico en el que se produce la Guerra de Sucesión (fin de la dinastía de los Austrias en España e inicio del reinado de los Borbones, apoyo de algunas potencias europeas a otro pretendiente).
- Guerra de Sucesión y Tratados de Utrecht y Rastadt (consecuencias territoriales del conflicto).
- Reorganización del estado: los Decretos de Nueva Planta (consecuencias para los territorios que habían apoyado a Carlos de Habsburgo).
- Conclusión.
Aquí tenéis un documental sobre el reinado de Felipe V, los primeros minutos ilustran el momento histórico en el que se sitúa nuestro concepto.
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