Intentando digerir todavía el acto de presentación de la estrategia nacional para el 2050 me debato entre empezar a congelar chuletones o releer "Alicia en el País de las Maravillas". El único punto que me permite relacionar ese libro y la cita que se hace en este sainete de mal gusto es la aparente abundancia de sustancias psicotrópicas en ambos casos.
Solo a partir de la psicodelia podemos comprender que se haga esta presentación en la misma semana en la que:
- Marruecos pone a prueba la frontera de Ceuta para demostrar que ahora el primo de Zumosol americano está de su lado y no del lado del país que le permite alojar su flota del Mediterráneo.
- La pandemia sigue su curso, que parece que se nos olvida...y a este paso llegará a 2050.
- Los millones de vacunados con la primera dosis de Astrazeneca comienzan a ver cómo expira el plazo que el prospecto propone para la segunda. Finalmente se recomienda Pfizer pero se autoriza a que voluntariamente podamos hacer lo que deberíamos haber hecho hace días.
- Conocemos los pavorosos datos sobre la deuda pública española...a este paso tenemos que cerrar el chiringuito antes de 2050.
Pero no nos debemos preocupar porque los dizque expertos de Moncloa ya nos tienen preparado el futuro a largo plazo porque se ve que el corto plazo no interesa. Si no fuera porque la situación es gravísima, sería para reirnos de esa colección de paparruchadas grandilocuentes donde, en realidad, no se hace ninguna propuesta concreta y solo se enuncian grandes objetivos que podrían firmar cualquier grupo de alumnos de Educación para la Ciudadanía con mucha más solvencia técnica.
Señores, dejen de reirse de la gente, la vida real no es una película de Netflix. Señor director de la Oficina Nacional de Prospectiva y Estrategia, deje de enlodar su curriculum y abandone ese puesto antes de convertirse en el hazmerreir del mundo académico. Si debemos destacar algo que sintetiza el espíritu de los 'idioters' (generación nacida ya en democracia que nos lo han dado todo hecho y por eso perdemos el tiempo pensando idioteces) es el gráfico que nos encamina el futuro deseado. En fin, prefiero ponerlo con el añadido que corrió por las redes sociales.
Paciencia y antiácido, igual llega la rectificación y nos presentan la cómo será la España del 2070. Para entonces habremos desaparecido los 'idioters' e igual se ha mejorado algo. Saludos desde el presente a aquellos que leéis esto desde el futuro.
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