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| Imagen: elpais.com |
Llegamos al final del bloque 3 del curso, parecía que no iba a llegar el día pero casi hemos terminado. Este bloque ha sido muy interesante: alérgenos, comedores escolares... La verdad es que se pueden sacar bastantes ideas para trabajar con los alumnos.
En la parte de "¿Cómo es tu día activo?" me parece interesante la reflexión acerca de cuáles son las actividades que realizamos a lo largo del día. Es una actividad fácilmente aplicable en el aula y podemos hacer que los alumnos representen uno de sus días tipo en un cronograma ¿Serían totalmente sinceros acerca del uso total de pantallas al cabo del día? Habría que verlo...
Uno de los aspectos que más me ha gustado trabajar ha sido el de los comedores escolares. Con hijos en edad escolar y en comedores diferentes ha sido muy interesante ver los menús mensuales desde una nueva perspectiva. Veo también fácilmente aplicable esta actividad al aula: la podríamos combinar con la de "Recuerdo 24 horas" y hacer el recuerdo de un mes completo. Es decir, no es planificar sino analizar a posteriori. Con el mes completo comprobar si nuestras comidas se acercan a la distribución de raciones recomendadas o no. Analizando los menús escolares lo que se observa es que tienden a contener más raciones de carne y menos de pescado de las recomendadas. Creo que en el caso de muchos de nuestros alumnos est también será así.
Y qué decir del apartado de enfermedades...debe ser este, sin duda, uno de los campos a trabajar desde las aulas para que los alumnos puedan conectar fácilmente y de manera duradera alimentacion inadecuada y enfermedad. Será uno de los problemas sociales y sanitarios más graves que deberán afrontar las sociedades desarrolladas en el próximo siglo. La epidemia de diabetes tipo-2 va en aumento y creo que las autoridades sanitarias aún no son conscientes de lo que se nos viene encima. No sólo en lo que a gasto sanitario se refiere sino también en cuanto a deterioro de la calidad de vida. Nuestros alumnos son los adultos de las próximas décadas y debemos intentar aportar nuestro granito de arena desde nuestro papel de educadores.
Como siempre, la labor educativa debe extenderse a toda la comunidad educativa; es imprescindible que los mensajes que se lanzan en el centro educativo se refuercen en casa (y eso muchas veces no ocurre). En mi opinión, lo ideal sería que se plantearan actividades para las familias e incluso grupos de trabajo donde pudieran participar padres y madres. Podría realizarse una sesión al mes por la tarde donde en cada ocasión algún experto (médicos de familia, nutricionistas, psicólogos...) venga al centro para hablar de algún tema relacionado con nutrición y salud. Dentro de ese grupo y asesorados por expertos podrían también elaborarse los materiales que después se trabajarán con los alumnos y las familias. De esta manera nos aseguraríamos que la información que transmitimos está totalmente actualizada y recoge los últimos avances científicos.
Termina aquí la reflexión sobre este bloque del curso. Se han tratado temas muy importantes y a los que continuamente tendremos que volver y reflexionar en estos momentos en los que parece que, pese a toda la informacion disponible sobre nutrición y enfermedad, cada vez nos alimentos peor.
